Detalle de cuadro de Rembrandt en la exposición temporal del museo Thyssen- Bornemisza de Madrid, Agosto 2020.
A principios del siglo XXI comenzaron a desaparecer las secciones y suplementos de salud de los grandes medios de comunicación. En los periódicos eran páginas y páginas de una nueva vacuna, del descubrimiento de una rara enfermedad; en los telediarios se dejaban espacios para que el público consulte y hasta tenían programas radiales propios.
Pero prácticamente todo fue desapareciendo, si los medios de comunicación son un reflejo del interés público hasta este año la salud era un tema menor, una cuestión de ancianos, las enfermedades eran noticias para el cuerpo médico y las campañas de vacunación eran parte de los planes de sanidad pública que tenían más que ver con propaganda que con periodismo.
Y llegó el 2020 y con ello la pandemia más globalizada de la historia de la humanidad encontrando a los medios masivos despojados de ciencia y salud pero repletos de deportes y sucesos. Desde enero de este año lo que comenzó como un pequeño espacio en la tapa de un diario lleva meses siendo el front desk de periódicos, revistas, muros, radios y canales de televisión. Es que así es la salud: no se le da importancia mientras se la tiene.
Como seres vivos que somos dependemos del funcionamiento de nuestro sistema inmunológico, esta es la noticia del año pero no se estaba preparado para cubrirla. Porque no dar una noticia de salud o darla de manera incorrecta puede tener un destino fatal, quizás sea momento de volver al siglo pasado y tener periodistas y espacios en los medios de comunicación que la salud se merece.
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